Etiqueta:

Salmo 24 (23)

Emeline d'Yèvres: Vivir la profecía cada día

Emeline d'Yèvres, eremita cisterciense del siglo XII en Champaña, encarna la vida contemplativa y la profecía humilde: penitencia radical, escucha silenciosa y dones de discernimiento al servicio de los humildes. La vida documentada y la memoria local se unen en el relato de su vida en el granero de Perthes Sèches (Yèvres-le-Petit), sus profecías reconocidas —en particular, las del barón Symon de Beaufort— y su desaparición iconográfica. Su ejemplo hoy cuestiona nuestra capacidad para discernir los signos divinos en la vida cotidiana y vivir un ascetismo auténtico, sin pompa ni búsqueda de reconocimiento.

«Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y a tu prójimo como a ti mismo» (Mt 22:34-40)

Amar plenamente: unir el amor a Dios y al prójimo para transformar la vida interior y social — oración, acción y relación como un solo aliento.